La reabsorción dental en gatos, también conocida como caries u odontoclasia, es una afección común y progresiva que afecta el esmalte dental y la dentina (el tejido duro que constituye la mayor parte del diente). Este problema puede afectar tanto a gatos jóvenes como mayores y puede provocar la pérdida de dientes.
Aunque es un problema común en los gatos, que afecta a entre el 30% y el 60% de la población, a pesar de una extensa investigación, las causas exactas de la reabsorción dental en los gatos no se comprenden completamente. Los factores genéticos, las infecciones, la inflamación crónica y las predisposiciones individuales pueden desempeñar un papel importante en la aparición de esta afección.
Se cree que una reacción inflamatoria en las encías y los dientes puede contribuir a desencadenar el proceso que conduce a la reabsorción dental en los gatos.
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Tipos. Reabsorción dental en gatos.
Hay dos tipos distintos de reabsorción dental en gatos:
reabsorción de la corona
Este tipo de reabsorción implica la destrucción de la corona del diente y a menudo se manifiesta por un defecto visible en la superficie del diente. En estas situaciones, la raíz permanece relativamente normal y el ligamento periodontal es visible en las radiografías. En algunos casos, se puede encontrar una fractura de corona y la raíz permanece en el hueso.
Reabsorción radicular
La reabsorción radicular implica daño a la raíz del diente. La radiografía muestra la migración de la raíz hacia el hueso y, a veces, se la denomina reabsorción de raíz de reemplazo. Este fenómeno puede afectar la estructura de soporte del diente y tener consecuencias para la estabilidad dental y la salud bucal del gato.
Síntomas. Reabsorción dental en gatos.
Sensibilidad al tacto. Los gatos pueden tener una mayor sensibilidad en la boca y reaccionar negativamente al tacto.
dificultad para comer. Masticar puede resultar doloroso y los gatos pueden desarrollar preferencias alimentarias, evitando los alimentos secos o prefiriendo los alimentos blandos.
salivación excesiva. La resorción dental puede provocar un babeo excesivo y los gatos pueden experimentar babeo.
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Dientes frágiles o fractura dental.. Los dientes afectados pueden volverse quebradizos y fracturarse, y los dueños pueden notar fragmentos de dientes en la saliva del gato.
mal olor del aliento. Las infecciones asociadas con la reabsorción dental pueden contribuir al mal aliento (halitosis).
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Diagnostico y tratamiento
El diagnóstico de reabsorción dental en gatos requiere un examen dental exhaustivo por parte de un veterinario. Puede utilizar radiografías dentales para evaluar el estado de los dientes debajo de las encías.
En cuanto al tratamiento, dependerá de la etapa en la que se encuentre esta condición. En las primeras etapas se pueden probar tratamientos conservadores como la eliminación de los depósitos de sarro y la aplicación de geles dentales.
En casos más avanzados, cuando la reabsorción dental ha progresado y está provocando dolor y malestar, puede ser necesaria la extracción de los dientes afectados. A los gatos se les pueden extraer los dientes afectados para aliviar el sufrimiento y mejorar la calidad de vida.
